- La teología moral católica sexual no va a cambiar, lo intente quien lo intente, porque toda la moral católica se iría por el mismo sumidero.
- Tenemos que recuperar el nombre, la figura y el enamoramiento de Cristo el Señor. Ya casi ni se le menciona ni se le nombra. La nueva evangelización ha desaparecido de la acción de la Iglesia cotidiana. Dejamos de evangelizar? Como conocerán a Cristo si no hablamos de El, si esconden hasta su imagen?